La fecha del 14 de febrero de 2024 pasará a la historia como el día en el que se recuperó para un uso público uno de los edificios más emblemáticos de la Plaza de España «El Salón», tras su rehabilitación; el Mirador de los Marqueses de Peñaflor, que acogerá a partir de ahora un servicio indispensable para la promoción turística de la ciudad.
Pero hasta llegar aquí el edificio ha atravesado por un gran número de vicisitudes. En 2004, hace justamente veinte años, el Ayuntamiento de Écija adquiere un acuerdo con la Fundación Peñaflor, entidad que gestiona el patrimonio de los Marqueses de Peñaflor, incluido el mirador, para llevar a cabo una permuta por unos terrenos adyacentes a las Escuelas Profesionales Sagrada Familia «SAFA». De este modo el edificio pasó a ser titularidad municipal.
Solo un año después, técnicos municipales presentaron informes que recomendaba el desalojo y la consolidación del edificio. Un nuevo informe técnico en 2023 agravaba la situación del inmueble y mantenía las recomendaciones. El edificio entra a formar parte de la Lista Roja del Patrimonio de la Asociación Hispania Nostra en 2014, y en 2016 un tercer informe da pie a iniciar la redacción del expediente de ruina física de este edificio del siglo XVI. En enero de 2022 dieron comienzo las obras de rehabilitación y finalizaron a mediados de 2023.
Inauguración
La obra de rehabilitación se ha ejecutado con cargo al Plan Contigo de la Diputación de Sevilla. El presidente de la administración provincial, Javier Fernández, junto con la Alcaldesa de Écija, Silvia Heredia, han sido los encargados de inaugurar el mirador una vez rehabilitado.
La rehabilitación y reforma del Mirador de Peñaflor ha tenido como objetivo destinar el edificio a un uso turístico y cultural, y entre otros servicios publicos, acogerá la Oficina Municipal de Turismo. La configuración del inmueble lo convierte en un lugar óptimo para el punto de partida de la información y la promoción turística de la localidad. Se encuentra ubicado en la Plaza de España, foco de interés turístico-cultural y es uno de los miradores con mayor riqueza patrimonial e histórica del municipio.
El presidente de la diputación ha destacado en su discurso la importancia de Écija y el momento por el que atraviesa «Écija hoy por hoy es uno de los municipios con mayor proyección que hay en la provincia de Sevilla por su ubicación, por su historia y por su capacidad». Al momento ha puesto en valor los «valores, principios y capacidad de mirar a su historia para ponerla en valor desde las costumbres, desde las raíces, sus tradiciones y desde la recuperación de su historia como estáis haciendo hoy con este Mirador, y que tiene también la capacidad mirar al futuro y buscar oportunidades’.
Recurso turístico
Por su parte, la Alcaldesa de Écija, Silvia Heredia ha resaltado que la rehabilitación del edificio, además salvar y proteger un edificio singular, tiene un valor añadido «hemos creado un nuevo recurso turístico y cultural para Écija, que contribuirá a impulsar el desarrollo económico y social de nuestro municipio. Queremos que el Mirador de Peñaflor sea un lugar de encuentro».
Al mismo tiempo, Heredia ha querido agradecer el trabajo realizado por todos aquellos que han participado en este proyecto «es importante incidir en la extraordinaria labor de los técnicos municipales y de los restauradores para llevar a buen fin el proyecto y a los fondos de la Diputación para poder ejecutar las obras»
Puertas abiertas
Tras la inauguración del edificio, en las próximas semanas se van a realizar jornadas de puertas abiertas durante los fines de semana entre las 10.30 y las 13.30 los sábados y domingo de febrero y del próximo mes hasta el 16 y 17 de marzo.
Mención Amigos de Écija
La asociación Amigos de Écija reconocerá en la gala de la vigésimo cuarta edición de los Premios en Defensa del Patrimonio Histórico, la rehabilitación del Mirador de Peñaflor, otorgándole uno de sus tradicionales «Soles».
Obra de rehabilitación
Estructuralmente, se conserva totalmente toda la estructura muraria del edificio, pero se han sustituido los forjados anteriores de rollizo, en muy mal estado en muchos casos e incapaces de soportar los requerimientos de las cargas actuales.
La escalera ha sido la única actuación de corte contemporáneo del edificio, ejecutándose de hormigón armado visto con zanca quebrada, peldañeado en barro y con barandilla de vidrio y acero inoxidable.
Para el refuerzo y consolidación de los muros, ha sido imprescindible el refuerzo de la cimentación de dichos muros mediante un sistema de micropilotes que durante las obras ha sido muy complicado de ejecutar, teniéndose que acceder con maquinaria a espacios muy reducidos y con un subsuelo con un estrato de gravas que dificultaron mucho los trabajos.
Balcones y elementos decorativos
Se han reforzado interiormente los balcones, y se han restaurado magníficamente todos los elementos decorativos como molduras, pinjantes, estatuas, remates y columnas, además de recuperarse pinturas y decoraciones originales inéditas en nuestra época. Se ha dotado al edificio de unas instalaciones e iluminación modernas y funcionales, además de darle una iluminación ornamental que resalte el magnífico edificio que ha quedado. Todas ellas adecuadas para un uso contemporáneo que a partir de un exhaustivo estudio histórico del edificio no ha hecho más que recuperar el uso original, subsanándose todas las patologías y recuperándose la fisonomía de éste en sus inicios.
Se han eliminado todos los arcos cegados y las galerías han vuelto a ser galerías para poder disfrutar de las vistas de la plaza. En planta baja se ha adecuado el espacio que ocupaba el estanco para albergar la oficina de turismo, ya que el edificio por fin se dedica hoy día al uso y disfrute de todos, ecijanos y turistas que visiten la ciudad. Las siguientes plantas sólo albergan pequeñas habitaciones de uso también turístico y aseos públicos.