.-El alcalde de Écija, Ricardo Gil-Toresano (PP), ha tenido que aclarar ante el Tribunal de Cuentas la gestión de ingresos ligados a los convenios del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) durante el pasado mandato del PSOE tras detectar «presuntas irregularidades contables» dicho organismo.
Según fuentes del Gobierno local ecijano (PP-PA), el Tribunal de Cuentas habría detectado «presuntas irregularidades contables» en el uso de más de nueve millones de euros ingresados desde 2005 como adelanto por los convenios urbanísticos del PGOU.
El PP ya denunció en 2009 el presunto desvío irregular de fondos procedentes del PGOU mientras estaba en tramitación, y los ingresos sólo pueden emplearse tras la aprobación definitiva del plan y siempre en patrimonio público del suelo.
También ha denunciado que ese dinero «se destinó a gasto corriente, al pago de nóminas», un asunto «delicado, complicado y serio», según la portavoz municipal del PP, Silvia Heredia.
El PSOE se ha asegurado que las operaciones contables investigadas contaron con el aval de los funcionarios y técnicos municipales pertinentes y recuerdan que la denuncia del PA sobre esta cuestión ya fue archivada por el juzgado de Écija.