Por segundo año consecutivo, más de 330 alumnos, una treinta de profesores y personal no docente del Colegio María Auxiliadora de Écija, a lo que se suman padres de los alumnos, han recreado en el patio de la Iglesia de San Juan un Belén Viviente con distintas escenas.
La iniciativa surgió el pasado año y el éxito de la misma, así como la demanda de familiares y amigos les ha llevado a repetir organizando una actividad en la que se implica prácticamente todo el centro educativo, con niños desde Infantil a 4º de la ESO.
El éxito se ha vuelto a repetir este año y prueba de ello han sido las colas que desde primera hora presentaba la puerta principal de la Iglesia de San Juan. Han sido muchos los grupos concertados previamente, provenientes de otros centros educativos, asociaciones y entidades locales y de localidades cercanas.
Esta respuesta hace pensar a los organizadores en consolidar la cita “lo estamos pensando”, señalaba el director del centro, Andrés Escamilla, quien también apuntaba que no es solo una decisión del profesorado ya que hay muchas personas y empresas implicadas.
De momento el resultado de las dos primeras ediciones hace pensar en continuar en los próximos años, lo que si parece claro es que solo se desarrollará en una jornada, tal y como se ha hecho hasta ahora “hacerlo en otros días no cabe en nuestros planes porque los niños terminan muy cansados”, apuntaba el director.
El Belén representa distintas escenas y oficios de la época. De este modo se pueden ver alfareros, fruteros, un huerto, el tradicional río y sus lavanderas, los pastores, los romanos y por supuesto el portal.
Para llevar a cabo el Belén se ha venido trabajando durante prácticamente todo el año. Después de la primera edición se estudiaron por parte de los responsables las propuestas de mejora y cómo implementarlas y una vez iniciado el nuevo curso se comenzó la implicación de todos “a principio de septiembre comunicamos a cada familias qué escena le corresponde a cada curso para que vaya buscando enseres y decoración”.
El Belén Viviente tiene además de un fin social. El donativo de un euro va destinado a Cáritas y distintas entidades con las que colabora el colegio, y una pequeña parte sirve para sufragar algunos gastos de la representación.v