Un desprendimiento de tejas el pasado domingo en el número 4 de la calle Merinos, concretamente en la casa del Gremio de la Lana, mantiene cortado al tráfico el primer tramo de vía, y limitado a un solo lado el tránsito de peatones. Esta situación está perjudicando a los vecinos, especialmente porque no es la única calle cortada en esta zona, desde hace semanas permanecen cerrado los accesos por la barrera de Quintana.
Los vecinos de esta zona de la ciudad se lamentan de que ahora para llegar al centro «debemos dar una vuelta innecesaria» una situación que empeora cuando de los vecinos que se habla son mayores «acuden a misa a Santo Domingo y esto les supone dar un vuelta tremenda y un desgaste físico», nos comenta Marta, una vecina del barrio, quien también se queja de la respuesta del ayuntamiento «las únicas medidas que pone el ayuntamiento es colocar vallas e imposibilitar cada vez mas las llegada a nuestras casa».
El corte en la barrera Quintana se produjo durante Semana Santa también por un desprendimiento de tejas en un edificio, mientras que el corte en el primer tramo de la calle Merinos, desde Puerta Palma, se produjo el pasado domingo.