Unos desconchones en la pared lateral recientemente restaurada de la fachada del Palacio de Peñaflor en la calle Cadenas –en la imagen-, han hecho saltar las alarmas entre algunos vecinos que cuestionan la restauración que finalizaba hace menos de un año. De esta preocupación, que ha tenido su reflejo en redes sociales, se ha hecho eco el Grupo municipal de Écija Puede, que ha solicitado una visita para comprobar si algo parecido está ocurriendo en el interior del palacio.
La rehabilitación del Palacio de Peñaflor en su primera fase se ha ejecutado con una subvención de 750.000 euros del 1,5 % Cultural del Ministerio de Fomento, a lo que el Ayuntamiento de Écija ha tenido que aportar 250.000 euros más. La obra la ha ejecutado la empresa TRAGSA, y a comienzos del verano de 2017 se daban por terminada.
No ha pasado un año desde la finalización de la restauración y ya han aparecido los primeros desperfectos, de los que habrá que determinar los motivos. En este sentido se ha pronunciado Écija Puede, que además de la visita que ha solicitado recientemente, también pedía hace unos meses una memoria de la intervención donde se recojan los materiales utilizados, aspectos técnicos y el personal y profesionalización de los mismos.
Desde la formación morada piden que se estudie el caso y si los desperfectos son responsabilidad de una mala ejecución de la obra “si no está bien terminado, la obligación de nuestros representantes políticos es pedir responsabilidades a la empresa que ha acometido dicha obra, es decir, TRAGSA”, señalaba Mario Perea, concejal por Écija Puede, a lo que ha añadido “no es lógico que no haya pasado ni un año y ya estén apareciendo algunos desperfecto, creemos que puede haber habido un mal uso de esta subvención”.
Para comprobar que desperfectos de este tipo u otros no están apareciendo también en el interior del palacio, y debido a que aún no está abierto al público, Écija Puede ha solicitado oficialmente una visita que aún no tiene fecha.
