El Alcalde de Écija, Ricardo Gil-Toresano, y el presidente del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Écija, Rafael Caro, han firmado este lunes el convenio de colaboración entre ambas partes que, en esta ocasión supone una aportación económica de 18.000 euros y la cesión de uso de instalaciones municipales.
Ambas partes han coincidido que este convenio, sobre todo en lo económico, no es suficiente, pero la situación de crisis ha obligado al Consistorio a rebajar las ayudas, aunque se espera poder ampliarlo en los próximos años “ya que la Semana Santa es la principal celebración de la ciudad por el número de personas que en ella participan”, ha señalado Gil-Toresano, quien también ha recordado que el Ayuntamiento también colabora con el Consejo en la cesión de instalaciones como el Teatro Municipal, para realización del pregón, o el antiguo convento de las Monjas Blancas para almacenar los palcos.
En todo ello ha coincidido Rafael Caro, quien considera que el actual convenio “no es el que las hermandades quieren y se merecen” aunque reconoce que se comprende y acepta “que la aportación económica sea inferior a la que se necesita”, la cual sitúa en 25.000 euros, siete mil más de lo que ahora perciben.
Caro detalla que el dinero del convenio se destina a la edición de cartelería, libretos y al pago de la banda de música, todo ello con proveedores que al final son los que soportan la rebaja en las ayudas.
Nueva sede
A lo largo de la reunión, el presidente del Consejo de Hermandades ha cursado invitación al Alcalde de Écija y al delegado de Cultura, para que visiten la nueva sede que se localiza en el convento de Las Filipenses, donde han alquilado una serie de dependencias a las que se puede acceder desde la calle Santa Cruz.
