La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha iniciado esta semana en Sevilla el proceso participativo que va suponer la redacción de la nueva Ley de Ordenación Urbanística Andaluza (LOUA). Para ello la consejería ha organizado una serie de jornadas en las provincias andaluzas, y ha invitado a distintos municipios a participar, entre los que se encuentra Écija.
En la reunión del martes estuvieron presentes técnicos de planeamiento del ayuntamiento astigitano, así como el delegado de Gestión del Espacio Urbano, Sergio Gómez, quien avanzaba que Écija va a formar parte de un equipo multidisciplinar que va a trabajar en la redacción de una nueva ley “que atienda a la casuística de cada uno de los territorios; que agilice los trámites, que unifique y mecanice todos los criterios a la hora de tratar los distintos tipos de suelo”.
Esta nueva ley tiene como objetivo dar soluciones a las distintas administraciones en materia de planteamiento y ordenación urbanística, pero por el momento se están organizando jornadas participativas que buscan intercambiar experiencias sobre el grado de cumplimiento de la actual ley y despeje las líneas maestras que debe seguir su reforma.
Junto con Écija han estado presentes otros ayuntamientos como el de Cabra, Sevilla o Soportújar en Granada, distintos municipios con distintas necesidades y experiencias.
En la primera jornada ha estado presente el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, quien ha indicado que la actual Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) necesita de una modificación para que se simplifiquen y agilicen los trámites administrativos, y para que se adapte definitivamente a los nuevos tiempos. El consejero entiende que dada su complejidad, es imprescindible contar con la opinión y participación de todos los actores que intervienen en el urbanismo, de ahí que se abra este proceso participativo para modificar la LOUA.
Fiscal ha recalcado que desde la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio se tiene claro que la LOUA necesita una revisión, tanto por los plazos de tramitación actuales, que supone que un Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) se resuelva en más de ocho años, como por la necesidad de profundizar en el principio de autonomía local, ya hay decisiones urbanísticas que se abordan mejor en el ámbito local.
Con la nueva LOUA se aspira a reducir los plazos actuales de tramitación a la mitad, de manera que la elaboración de un PGOU pueda sustanciarse en los cuatro años que comprenden un mandato municipal.
Por último, José Fiscal ha comentado que el objetivo a partir de ahora pasa por construir el consenso necesario para iniciar esa revisión, ya que se trata de dotar de un nuevo marco a una actividad como la urbanística que tanta incidencia tiene sobre el territorio, la economía, el empleo, los ayuntamientos y los ciudadanos.