Un grupo compuesto por una veintena de personas integrantes del Master de Arquitectura de la Universidad de Barcelona, se han interesado en conocer los detalles de las construcciones de las distintas épocas de Écija: desde la tartésica hasta la barroca, pasando por la romana, medieval o mudéjar.
La visita forma parte de un viaje organizado como fin de postgrado en el que han visitado Sevilla, Córdoba y Écija, algo que deja claro “la relevancia que puede tener nuestro patrimonio no solo a nivel turístico, sino también a nivel científico y divulgativo” como señalaba el delegado de Gestión del Espacio Urbano, Sergio Gómez, quien destacaba que la elección de Écija se debe a la variedad de alternativas que ofrece “tienen en Écija como un perfecto laboratorio donde encuentran retos perfectamente conservados; restos que han sido restaurados, y restos que están por restaurar, como es el caso de la Plaza de Armas”.
Precisamente en el yacimiento arqueológico de la Plaza de Armas se ha iniciado una visita que les ha llevado además por la iglesia de San Gil, los palacios de Peñaflor y Benamejí y la iglesia de Los Descalzos. En este itinerario los visitantes han podido hacer un viaje arquitectónico por distintas épocas de la ciudad, comenzando en los restos tartésicos y romanos de Plaza de Armas, hasta el mayor ejemplo del barroco ecijano.
Iniciativas de este tipo amplían las posibilidades de Écija en materia turística centralizada en el turismo científico y de divulgación, algo en lo que destacan desde el ayuntamiento que se está trabajando y prueba de ello será la firma de un convenio de colaboración con la Universidad de Sevilla para trabajar “en la realización de cursos de postgrado y masters de recuperación y restauración”, como adelantaba el responsable municipal.