El Ayuntamiento de Écija no tiene ninguna confirmación por parte del Ministerio de Fomento ni de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que confirme el anuncio realizado por el Partido Popular en la Comisión de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Parlamento de Andalucía, informado sobre el inicio de la construcción del embalse de San Calixto. Para el Gobierno local, este anuncio responde a fines electoralista.
El portavoz del Gobierno local, José Antonio Rodríguez, ha señalado en este sentido, que no se tiene ninguna resolución del ministerio en torno a este asunto, aunque reconoce que es el camino en el que se está trabajando «se han mantenido reuniones con el comisario de agua de la confederación para hacer entender la importancia de esta obra» pero de momento no hay nada concreto.
Para Rodríguez, el PP «vuelve a confundir las administraciones con la política» y entiende que la vía utilizada por los populares para hacer este anuncio no es la más adecuada, ya que debería de ser el ministerio quien lo comunicara directamente al Ayuntamiento de Écija, es por lo que considera que este anuncio responde más «a la confluencia de las próximas elecciones, y al estar en periodo electoral, más que una concreción», aunque apostilla «ojalá fuera así y tenga que desmentir esto porque mañana recibamos la resolución del ministerio indicando que se ha concedido a Écija la realización de la presa de San Calixto y el arreglo del azud».
El embalse de San Calixto es una vieja reivindicación que se entiende como la solución definitiva que evite las inundaciones en Écija una vez se ha concluido la obra del encauzamiento del arroyo Argamasilla.
La presa de San Calixto, con una capacidad de 80 hectómetros cúbicos, está proyectado con el objetivo de regular las crecidas de ríos como el Cabra o el Salado, que vierten a la cuenca del Genil se trata de un embalse de regulación que ya se incluía en los planes hidrológicos de la entonces Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) en 2007. En 2011 desde el Gobierno central, la por entonces Ministra de Medioambiente, Rosa Aguilar, señalaba que la presa «está declarada de interés general y está dentro de las prioridades del ministerio», aunque poco tiempo después el proyecto quedaba paralizado.
