Las noches de la mayoría de los jueves del mes de agosto se han convertido en noches de cine para muchas familias ecijanas que han visto como un buen plan ver una película al aire libre en el parque San Pablo de Écija. Esta actividad responde a la iniciativa “Cine de verano” que este año ha contado con cuatro proyecciones y un balance de unos 2.300 espectadores.
Desde su puesta en marcha, y concretamente desde su traslado al parque San Pablo, el cine de verano se ha convertido en una de las actividades más esperadas a lo largo del verano en Écija, porque permite disfrutar en familia de una película en un espacio al aire libre y con libertad para verla desde donde y como quiera. Para unos es imprescindible las sillas de la playa e incluso alguna mesa, para otros con una simple manta, a modo de picnic es suficiente, otros simplemente se sientan o se tienen sobre el césped, y siempre los hay que prefieren verlo en pie.
En esta edición se han proyectado cuatro películas, todas ellas dirigida principalmente a un público infantil pero que se pueda disfrutar en familia. Para ediciones posteriores no se descarta ampliar el número de sesiones.
Tal y como está programado en estos momentos, el cine de verano tiene unos costes de unos 2.500 euros, entre derechos de autor y alquiler del equipo necesario para las proyecciones. La selección de películas debe de cumplir una serie de requisitos, especialmente en una localidad como Écija donde existen salas de proyección.
Según el responsable municipal de Juventud y Deportes, José Luis Riego, el balance de esta edición es muy positiva, principalmente por la respuesta del público, aunque se van a estudiar mejoras para el próximo año atendiendo a recomendaciones de los asistentes como la separación de espacios “en un primer espacio estarán ubicadas personas que vayan con mantas o toallas para sentarse en el césped y a continuación la zona de butacas”, apuntaba Riego.
