Con los primeros instantes del Viernes Santo comienza la madrugá de Écija que tiene como principal protagonista a la Hermandad del Silencio, que a las 00.00 horas sale de la Iglesia de Santa Cruz en el más absoluto silencio y en penumbra a realizar su Estación de Penitencia.
La oscuridad de la noche solo se ve alterada por las luz de las velas que portan los nazarenos, ya que el alumbrado público se apaga al paso de esta hermandad.
Paso a paso, y propagando el silencio por donde pasan, la hermandad del Abrazado a la Cruz y la Virgen de Amargura han abierto una madrugá repleta de sombras y de gestos que han demostrado que no es necesario hablar para expresar sentimientos y devoción.
Según los responsables de la propia hermandad, ha sido especialmente buena, en la que la temperatura ha acompañado y el pueblo ha respondido.
Fotogalería de la Semana Santa 2017