El delegado territorial de Cultura de la Junta de Andalucía, José Manuel Girela, ha visitado este lunes junto a técnicos de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento de Écija, el convento de Santa Florentina y el Monasterio de Santa Inés del Valle, un paso previo a la declaración de ambos inmuebles como Bien de Interés Cultural (BIC).
Según Girela, la visita ha tenido un carácter puramente “político y técnico” y responde a la necesidad de realizar una valoración sobre el contenido y continente de ambos edificios así como de su entorno ante una solicitada y posible declaración como BIC, algo que requiere de informes técnicos.
Tanto el delegado como el Alcalde de Écija, David García Ostos que le ha acompañado en la visita, han resaltado la necesidad de conocer la situación de ambos inmuebles y la catalogación de su contenido, para que la protección como BIC alcance ambos aspectos y evitar de este modo situaciones como las vividas en la ciudad con otros edificios ya catalogados “hay monumentos que están declarados BIC pero no hay una catalogación del patrimonio que hay dentro y parase que no hay protección clara del contenido”, en clara alusión al convento de “Las Teresas”.
Ambos representantes de la administración pública también han coincidido en recordar que tanto el convento de Santa Florentina como el Monasterio de Santa Inés del Valle ya son edificios protegidos dentro del Plan Especial de Protección, Reforma Interior y Catálogo del Conjunto Histórico-Artístico de la ciudad de Écija (PEPRICCHA), y que la declaración como BIC vendrá a otorgarle un nuevo grado de protección y otras ventajas como la obligatoriedad de la apertura pública durante al menos cuatro días al mes.
La declaración como BIC es algo que depende del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, y para ello son necesarios informes técnicos, y como en este caso, la catalogación de bienes muebles, algo que puede prolongar el tiempo esta declaración, por lo que no se han querido dar fechas.
Por último el alcalde se ha referido a la rehabilitación de estos inmuebles, en especial el Monasterio de Santa Inés, sobre lo que ha señalado que la situación económica no permite de momento llevar a cabo este tipo de proyectos, aunque si considera necesario antes de la recuperación, trabajar en evitar en que se continúen deteriorando.