La Fiscalía de Sevilla retiró hoy los cargos contra F.V.F. y C.V.F. (padre) al considerar que no ha quedado probada su intervención activa en la pelea que tuvo lugar en la localidad sevillana de Écija y por la cual el agredido perdió dos dientes y sufrió distintas heridas por todo el cuerpo.
Así, y según informaron a Europa Press fuentes del caso, durante la vista oral celebrada en la mañana de hoy lunes en la Sección Séptima de la Audiencia Provincial, la víctima, que acudió a declarar en calidad de testigo, aseguró que en la pelea únicamente participaron él y C.V.F. (hijo), pero aseguró que tras tener lugar esta disputa denunció a los tres procesados «porque estaban en el lugar de los hechos».
En este sentido, el agredido, que responde a las iníciales M.V.R., puso de manifiesto durante el juicio, en contra de lo que declaró una vez tuvo lugar la discusión, que tanto F.V.F. como C.V.F. (padre) habrían intervenido en la pelea para separar a los implicados. Además, reconoció que en el momento de la disputa portaba un cuchillo, aunque no llegó a utilizarlo. De igual modo, indicó que los dos dientes que se le cayeron durante la pelea eran postizos, señalando además que los procesados procedieron a pagarle la factura del dentista, la cual ascendió a algo más de 1.000 euros.
Una vez escuchado el testimonio del agredido, el Ministerio Público decidió retirar la acusación contra F.V.F. y C.V.F. (padre) al considerar que no ha quedado probada su intervención activa en los hechos denunciados, mientras que para C.V.F. (hijo) solicita un año y seis meses de prisión por un presunto delito de lesiones, al señalar que golpeó «de forma importante» a la víctima.
Por su parte, el letrado defensor de este último expresó su conformidad con la calificación de los hechos realizada por el fiscal pero no así con la pena solicitada, pidiendo en este punto únicamente seis meses de cárcel para su patrocinado por un presunto delito de lesiones.
Hay que recordar que el Ministerio Público solicitaba antes de la celebración de la vista oral para cada uno de los tres acusados cuatro años de prisión y el pago de una indemnización conjunta y solidaria de 7.200 euros por un presunto delito de lesiones.