.-Dos inspectores de Salud Pública de la Delegación Provincial del ramo han procedido sobre las 14,00 horas de este viernes a analizar el etiquetado y estado en general de los productos que se encuentran en el supermercado ‘Súper M’ de Écija, después de que la jueza que instruye este caso haya autorizado su entrada a este local, que permanece precintado por orden del Ayuntamiento astigitano.
Fuentes de la Delegación Provincial de Salud consultadas por Europa Press han detallado que la labor de estos inspectores se centrará básicamente «en comprobar si el etiquetado de los productos es el correcto, si han sido o no manipulados y si la fecha de caducidad que pone se corresponde realmente con la que tiene el producto».
De igual modo, han precisado que se llevará a cabo una inspección ocular de la limpieza del local, así como de la correcta temperatura de los productos que en el mismo se hallan, sobre todo, los perecederos.
Las citadas fuentes han aclarado, igualmente, que los consistorios «tienen autoridad sanitaria para cerrar un establecimiento alimenticio» cuando detectan posibles anomalías perjudiciales para la salud y han informado de que fue «en un control rutinario de la Policía Local» llevado a cabo en dicho establecimiento «cuando comprobaron que existía alimentos posiblemente caducados».
Respecto a cuándo se podrá disponer de los primeros resultados que determinen o no si el dueño de este establecimiento tenía productos caducados con el etiquetado manipulado, las mismas fuentes han puntualizado que tendrá que ser la propia jueza que lleva el caso quien facilite estos datos.
El establecimiento continúa vigilado por miembros de la Policía Local mientras que el detenido, M.C.P., que regenta este negocio desde mediados de los noventa, ha prestado declaración en un par de ocasiones a lo largo del viernes