Un informe realizado durante los últimos meses por especialistas y que se compone de unas 80 páginas, llega a la conclusión de que existieron “deficiencias médicas”, en el caso de una niña de tres años de edad que falleció el pasado mes de octubre tras ser sometida a una operación en le Hospital de Alta Resolución de Écija.
Así lo detalla el bufete de abogados de los padres de la niña, desde el cual también se concreta que se ha presentado una querella en el Juzgado de Écija, al considerar que los hechos pueden ser constitutivos de un delito de homicidio por imprudencia.
El informe, según su abogado, se centra en la segunda ocasión en la que la pequeña fue trasladada a urgencias por sus padres, concretamente el 23 de septiembre de 2022. Los síntomas que presentaba la niña eran “no hablaba, tenía fiebre, palidez y no tragaba””.
Una vez en el centro sanitario, según la información que aporta abogado, no se le realizó un análisis de sangre, no estuvo en observación y tampoco fue derivada a un especialistas “todos estos desaciertos produjeron un retraso muy considerable en el diagnóstico que abocaron a la muerte de la pequeña”, según recogen los especialistas en el informe.
La niña fue trasladada un día después desde Écija a un centro sanitario de Sevilla, donde fallecería el 2 de octubre de 2022. Desde entonces “nadie del citado hospital se ha puesto en contacto con los padres para darles el pésame”, señala su abogado, y tampoco “les han dado explicaciones”.