Normalmente la zona de almacenes de un museo acoge un mayor número de piezas que las que se exponen en los espacios museísticos que son los que recorren los visitantes. Los almacenes del Museo Histórico Municipal de Écija no son una excepción y sus estanterías se guardan mosaicos, restos de estucos, columnas, capiteles, columnas e infinidad de elementos de épocas pasadas.
Este espacio no está dentro del circuito de visitas trazado en el museo, aunque en varias ocasiones a lo largo del año abre sus puertas para que se pueda conocer parte de lo que se guarda “utilizar nuestros almacenes de nuestro Museo Histórico Municipal como otro reclamo turístico”, señalaba Sergio Gómez, delegado de Urbanismo, Desarrollo Socioeconómico y Medio Ambiente.
Estas visitas en unos meses van a poder ser continuadas y pasarán a engrosar la oferta del Museo Histórico Municipal, gracias a las obras que se están acometiendo y que se prolongarán hasta mediados del mes de agosto.
El trabajo ha comenzado por desalojar el almacén principal, cientos y cientos de piezas se han trasladado provisionalmente a otro lugar del museo. Los trabajos han continuado con un revestimiento ignífugo en determinadas zonas, así como el tratamiento contra humedades, aislamiento en las cubiertas, que ha rebajado la temperatura interior y el sistema de iluminación.
La obra también va a suponer la creación de una nueva dependencia en el interior del almacén que acogerá algo más de 2.500 restos humanos de los localizados en el cementerio islámico localizado durante las obras de construcción del aparcamiento subterráneo de la Plaza de España “El Salón”, algunos de estos restos serán expuesto y ser visualizados a través de una mampara.
Para llevar a cabo esta intervención se ha contado una subvención de 54.000 euros de la Consejería de Turismo dentro del programa de fomento de la accesibilidad universal y la puesta en valor turístico del patrimonio público cultural de los municipios del interior de Andalucía (PATCUL), es por ello por lo que también se van a realizar distintas actuaciones que mejoren la accesibilidad de este espacio.
Por un lado se va a construir una rampa que permita el acceso a personas con movilidad reducida desde la zona declarada Bien de Interés Cultural del Palacio de Benamejí, en el patio interior, hasta los almacenes. También supone la instalación de indicadores en distintos idiomas para que adaptarlos a visitantes de distintos países.
Las obras se espera que estén finalizadas para mediados de agosto pero habrá que esperar hasta después del verano para que los almacenes del museo puedan ser visitable gracias a estos trabajos.