Con un disfraz de mago “de andar por casa”, con un telón a medio abrir y sentado en un viejo sillón, ha comenzado el pregón del Carnaval de Écija 2013, a cargo de Guillermo Ruiz, quien con una barita mágica un poco desajustada, ha hecho magia llenando el Teatro Municipal de todos los sentimientos que rodean esta fiesta, para lo que han ido apareciendo personajes populares vinculados con el carnaval ecijano.
Guillermo ha comenzado repasando, e ironizando –como es de recibo en una fiesta como el carnaval- sobre con la situación actual: los recortes, la corrupción política…, en definitiva, la actualidad.
Desde el patio de butacas el pregonero se ha mezclado con el público, creando una simbiosis de magia –nunca mejor dicho- que mezclado con unas gotitas de música ha conseguido que todos los asistentes formen parte del espectáculo, porque como ha gritado Guillermo “la vida es un carnaval”.
Los recuerdos y anécdotas han inundado las líneas del pregón de Guillermo, quien ha recordado y ensalzado la importancia que el carnaval ha tenido para esta ciudad
Los poderes de este mago han hecho posible reunir a una de las agrupaciones más recordadas de la fiesta “Los azulejos” -los originales-, con Paco Díaz, Fernando Reina o “El Pio”, que de nuevo han cogido el pito de caña y han cantado coplillas, tres concretamente; una dedicada a los padres, otra a las madres, y a Écija
Precisamente a su ciudad ha terminado dedicando piropos y regañinas Guillermo Ruiz, quien ha puesto punto y final con música, dedicatorias y un llamamiento para que el carnaval se viva en la calle.