Cuando la mayor parte de la ciudad duermen, en un rincón de la ciudad el gentío se concentra y murmura a la espera de las seis de la mañana para que las puertas de la Iglesia de San Juan se abran y den paso a la hermandad más madrugadora de la Semana Santa de Écija, esa que sirve de puente entre la noche y el día del Viernes Santo.
La Hermandad de San Juan, con sus titulares Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de las Misericordias, han podido ver amanecer entre chicotá y chicotá por unas calles ecijanas en las que no han faltado los fieles que han querido contemplar su paso acompañados por el canto de algunos pájaros y el paso sincronizado de los costaleros.
Cuando la mañana ha avanzado hasta el mediodía y la cera de las velas ya se han consumido en buena parte, de nuevo la cita estaba en la plaza de San Juan para contemplar el regreso al templo de esta hermandad que abre una jornada repleta de ambiente cofrade.
Vía Crucis
Como cada Viernes Santo, la imagen del Santísimo Cristo de la Expiración ha sido portada desde la Iglesia de Santiago hasta distintas iglesias y conventos de la ciudad en un Vía Crucis que daba comienzo a las 12.00 horas.
Fotogalería de la Semana Santa 2017