El matador de toros retirado y actual apoderado José Antonio Campuzano, se recupera en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla del percance sufrido el pasado miércoles en la finca de la ganadería de Fuente Ymbro, cuando uno de sus toros le ha propinaba una «severa paliza» que le ha producido «un corte en el cuello, además de fracturarle el maxilar superior».
El ecijano ha comenzado a ingerir alimentos líquidos y el lunes volverá a ser intervenido, según ha confirmado su hijo Luque Campuzano, quien ha añadido que la esta nueva operación va encaminada » devolver la correcta colocación de la mandíbula, ahora mismo desencajada, pero sobre todo a corregir la doble fractura que existe en el maxilar superior, para lo que se procederá a colocarle una pequeña placa que fije la zona afectada”.
A las pocas horas de conocerse la noticia, su hermano, Tomás Campuzano, confirmaba que José Antonio sufría un fuerte traumatismo en el tórax, además de una «fractura del maxilar, daños severos en la encía y en la lengua, además de la pérdida de varias piezas dentales», a lo que se suma una herida «de oreja a oreja», que, al final, ha quedado en un «susto» al ser una herida «limpia y superficial», que, por escasos milímetros, «no le ha afectado a la yugular ni a ningún vaso importante».
El percance sobrevino cuando el poderdante de Campuzano, Alberto Aguilar, se encontraba toreando a puerta cerrada, cuando «a la salida de un capotazo el toro se arrancó de largo, sorprendiendo a José Antonio, que se encontraba de espaldas hablando con el picador, sin ser consciente de lo que se le venía encima», declaró también a Efe el propietario de Fuente Ymbro, Ricardo Gallardo.
«El animal le volteó y se cebó con él en el suelo, propinándole golpes con las pezuñas, la testuz y los pitones, que menos mal que estaban »arreglados» porque si no la gravedad del percance hubiera sido mucho mayor», confesó el ganadero.
Campuzano fue inmediatamente evacuado en UVI móvil al hospital de Jerez de la Frontera –posterior era trasladado a Sevilla- para ser operado de urgencia por un cirujano maxilofacial, y donde ha pasado la noche en la UCI acompañado por Alberto Aguilar, «que no se ha separado de su lado en ningún momento», y donde deberá permanecer ingresado por un tiempo «aún sin concretar», finalizó Gallardo.