La policía ha identificado a un menor como presunto autor de lanzamiento, el pasado sábado, de un ladrillo desde la azotea de un bloque de pisos de la Ronda de los Molinos. El ladrillo alcanzó a un hombre de 65 años que permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Virgen del Rocío, en Sevilla.
El delegado de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Écija, Carlos Onetti, ha señalado, que los cuerpos de seguridad también podido confirmar que el objeto fue lanzado, y que no se trató de un desprendimiento como en un principio se pudo creer, ya que tras una inspección de la azotea del bloque puso de manifiesto que, en dicha azotea, había restos de ladrillos presuntamente manipulados por la mano humana. A partir de ahí, y según Carlos Onetti, varios vecinos habrían testificado que en últimamente un grupo de niños tenía por «práctica habitual» subir hasta la azotea del edificio y desde allí lanzar objetos a la calle.
Poco después, un menor era «identificado» como presunto autor del lanzamiento del ladrillo, aspecto que habría sido trasladado a la Fiscalía de Menores, toda vez que el herido sigue en estado «muy grave» en la UCI.
Los hechos ocurrieron el pasado sábado sobre las 12.25h, cuando en el servicio de emergencias 112 se recibió una llamada en la que se indicaba que un hombre había recibido el impacto de un ladrillo y que como consecuencia se había producido una hemorragia, y el hombre había caído al suelo, se trataba de Antonio Pérez, un hombre de 65 años que se disponía a regresar a su casa tras realizar una compra en un supermercado. La gravedad de las heridas llevaron a los servicios sanitarios a tomar la decisión de trasladarlo en helicóptero a Sevilla, donde permanece ingresado en la UCI del hospital Virgen del Rocío, con fractura y hundimiento craneal, y se teme por su vida.