La sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia Andalucía (TSJA), se ha pronunciado en torno a una demanda presentada contra la consejería de Salud de la Junta de Andalucía, en la que el retraso de un diagnostico, provocó el fallecimiento de una mujer en 2003.
Tras esta sentencia del TSJA, que ha tardado en conocerse seis años, la consejería tendrá que indemniza a la familia de la fallecida con 80.000 euros, por un diagnostico erróneo de una paciente en el Hospital de Écija, a la cual no le detectaron a tiempo un tumor maligno que finalmente acabó con su vida.
Según la reclamación realizada en su día por los abogados Fernando Osuna y José María Yuste, la víctima, una mujer de 48 años y con tres hijos, comenzó a ser tratada de 1995 por lo que consideraron como problemas de depresión, cuadros catarrales, urticarias y dispepsia gástrica, algo que la obligó a visitas frecuentes hospitales y consultas medicas. A mediados de 2001 las molestias padecidas se hicieron más frecuentes e intensas, obligándola a abandonar su trabajo como jornalera en el campo.
Los fuertes dolores en el vientre, estreñimiento, vómitos y malestar general, que sufría la víctima, la llevaron a visitar el servicio de Urgencias del Hospital de Écija, en 16 ocasiones desde julio de 2001, a septiembre de 2003, en algunos casos repitiendo las visitas un mismo día y en días consecutivos.
Dos días después de su última visita a urgencias, fue ingresada en el Hospital de la Merced de Osuna, donde finalmente se le diagnostico el cáncer. Esto ocurría en octubre del 2003 y unos días después.
