Con grandes dosis de imaginación, colorido y ganas de pasarlo bien, miles de personas se han sumado al gran desfile de carnaval que esta sábado ha recorrido las calles de Écija en la que es la máxima expresión de la fiesta precuaresmal.
Como cada año, han sido muchos los que han sorprendido con disfraces que parecen imposibles, otros en cambio han recurrido a lo fácil, en cualquiera de los casos, todo son válidos para pasar un buen rato y hacer que los demás también disfruten con el simple hecho de ver como los demás se lo pasan bien.
Personajes de dibujos animados, los clásicos aborígenes, o aquellos que recurren a la actualidad para ocupar otro papel durante unas horas, han sido los disfraces que se han podido ver desde primeras horas de la tarde y hasta altas horas de madrugada.
Como estaba previsto el desfile ha comenzado en la Plaza de la Zarzuela, aunque un poco más tarde de lo previsto. Este año el objetivo que se planteó desde la organización era intentar llegar al centro de la ciudad antes que en ocasiones anteriores, finalmente el desfile se daba por concluido sobre las ocho y media de la noche.
Tras el desfile la noche ha finalizado, entre otros lugares, en el Casino de Artesanos donde se ha organizado un gran fin de fiesta.
El desfile se ha desarrollado dentro de la normalidad y solo se han registrado algunas caídas e incidentes de poca consideración.
Este año el desfile no pone el punto y final al Carnaval de Écija, para el domingo a media mañana se anuncia «La quemá del mollete» en el Casino de Artesanos. El lunes se conocerán los premiados en el concurso de disfraces y el martes se entregarán los premios.
